Estimadas familias:
Acaba un año muy complicado para toda la sociedad. Un año que hemos transitado con miedo e incertidumbre desde que la crisis sanitaria cambió de un día para otro nuestra vida y que ha sido especialmente duro para quienes han sufrido por la pérdida o la enfermedad de un ser querido y para aquellos a quienes la crisis económica derivada les ha impactado con más virulencia.
Concluye también el primer trimestre de este curso tan atípico, que ha supuesto un desafío sin precedentes. A través de estas líneas, agradezco de corazón la responsabilidad y ejemplaridad de todo el alumnado y sus familias que, junto al trabajo del personal docente y no docente de nuestros centros educativos, nos ha permitido mantener la docencia presencial aun en estas complicadas circunstancias.
Nos quedan aún por delante unos meses muy complicados durante los que todos tendremos que seguir cumpliendo escrupulosamente, como hasta ahora, todas las medidas de prevención y seguir trabajando para que la incidencia del COVID en el ámbito educativo sea mínima. Es verdad. Pero es tiempo también de hacer balance y pararnos un momento a felicitarnos como sociedad por este éxito colectivo, en el que ha sido clave el comportamiento ejemplar de la infancia y la juventud de Cantabria. Fueron un ejemplo durante los meses de confinamiento y lo han sido, de nuevo, en la vuelta a las aulas.
Os trasmito a través de estas líneas mi deseo de unas Felices Fiestas para todos y un próspero 2021 repleto de momento compartidos. Un 2021 en el que nuestras aulas puedan, por fin, recuperar la normalidad.
Marina Lombó